Innovación en la intervención social y trabajo en red made in Palma Palmilla

Es llamativo que en un encuentro citen una praxis o herramienta de una organización y que no sea dicha organización  la que lo cuenta. Quizá ese es un primer indicador de que dicha herramienta o praxis sirve de inspiración. Eso ha pasadao en la jornada inaugural de Tecnosocial, un encuentro de innovación en los servicios sociales que reúne a 85 voces expertas de Andalucía y España. Ahí el Ayuntamiento de Málaga ha expuestoel uso que hacemos de las listas de difusión de Whatsapp y de Google Calendar en la zona desfavorecida de Palma Palmilla.

Estas herramientas y su aplicación a la mejora del trabajo en red en Palma Palmilla no son una exclusiva de Onda Color, sino que han sido trabajadas y consensuadas en la Mesa de Empleo del Plan Comunitario Palma Palmilla Proyecto Hogar, la metodología que hace protagonista al vecindario en la definición de qué pasa, qué se puede hacer y la supervisión de la eficacia de lo que se hace, aglutinando compromisos de ciudadanía, entidades sociales y administraciones.

Google Calendar y Whatsapp son herramientas que aplicamos en los proyectos de la convocatoria ERACIS  19/20 y 21/22 que una decena de asociaciones desarrollan en Palma Palmilla para mejorar la empleabilidad y otras áreas de la vida del barrio. GCalendar nos sirve como guía de recursos formativos y de otro tipo que actualizamos en torno al mes 20 de cada mes. Cada entidad vuelca sus recursos en lso calendarios, lo cual permite superar el eterno problema de actualización de las guías de recursos. Usando la opción de lupa, las entidades pueden buscar los recursos e incluso en algunos casos inscribir a la persona que está siendo atendida en dicho recurso. Estos calendarios son accesibles desde la web del plan comunitario del barrio.

La lista de difusión de Whatsapp es en realidad un conjunto de 3 listas. Unas 600 personas, la mayoría de Palma Palmilla, están dadas de alta gracias a que las diferentes asociaciones y los servicios sociales comunitarios proponen a la ciudadanía que autoricen su alta en el sistema conforme a la legislación de protección de datos. Por esta vía se difunde la oferta formativa, podcast de empleo, entrevistas a personas que hacen talleres, mensajes de concienciación, etc. Es una manera de que la gente sepa qué se mueve en su barrio y en Málaga y, teniendo dicha información, tomar decisiones que actualizan su propio itinerario de inserción sociolaboral.

¿Qué es trabajar en red?

Al inicio de Tecnosocial 2022 quisimos resumir en un hilo de Twitter las claves del trabajo en red y la innovación en intervención social que se hacen o se debaten en Palma Palmilla. El trabajo en red se ha convertido en una metodología clave en muchos proyectos y convocatorias de subvenciones. Sin embargo, muchas veces se queda solo en un lugar común del que se habla más de lo que se practica.

En este vídeo, intentamos definir con más profundidad el trabajo en red.

Trabajo en red no es trabajo en cuerda, es decir colaborar entre dos asociaciones. Para eso ya existe el verbo colaborar. El trabajo en red es un intercambio de relaciones y colaboraciones entre agentes múltiples (más de 2) y de naturaleza diversa (asociaciones, administraciones, empresas). Solo así tenemos una red en la que todos los nudos se relacionan y dependen unos de otros. Es fundamental asumir que el proyecto propio pasa a formar parte del proyecto de los demás y viceversa. Y que eso conllevará la evaluación desde fuera de dicho proyecto, entre otras claves. El trabajo en red consume muchos recursos de tiempo y reta constantemente el ego de las organizaciones públicas y privadas que se relacionan mediante esta metodología.

Además, en Palma Palmilla estamos trabajando en otras claves para la mejora del trabajo en red, especialmente las vinculadas a los proyectos de las convocatorias ERACIS para mejorar la empleabilidad, la salud, la vivienda y la imagen de las zonas desfavorecidas, entre otros.

1. Parte de la innovación en la intervención viene de la mano de la comunicación:  el texto de ERACIS reconoce expresamente a las radios comunitarias como agentes en las zonas desfavorecidas para conseguir transformación. En la práctica, el beneficio que aportan estas organizaciones no se deriva solo de sus emisiones FM, sino de ser un colectivo social especializado en la comunicación aplicada a la transformación social que tiene capacidad para dinamizar procesos de mejora colectiva.
2. Defendemos que se usen las redes sociales, no solo mediante publicaciones orgánicas, sino también mediante publicidad de pago, para difundir acciones formativas y actividades de los proyectos. Suena muy moderno, pero no nos olvidemos de algo más tradicional: los buzoneos de folletos son una vía relevante para llegar a la población cuando lo que sea aporta tiene valor para la comunidad (como la formación). Debemos usr las nuevas y las viejas formas de comunicación para que las políticas públicas lleguen a capas de la sociedad que las necesitan pero no están familiarizadas con los servicios sociales comunitarios.
3. Sobre Google Calendar y las listas de difusión de Whatsapp ya hemos hablado más arriba 😉
4. Esforcémonos por integrar todos los esfuerzos y proyectos de un mismo territorio buscando sus complementariedades. Da igual quién los financie. Google Calendar permite una integración operativa sencilla de los recursos de diferentes programas con una buena orientación para el trabajo en red, pero antes de ello deberá trabajarse la superación de dudas, bloqueos y miedos entre personas y organizaciones con diferentes financiadores.
5. La gente de una zona desfavorecida no solo tiene problemas. En Palma Palmilla, sobre todo, la gente tiene proyectos e ideas que van más allá de su barrio: son una lección y modelo para el resto de la ciudad. La gente tiene capacidad para definir lo bueno y malo que pasa en su entorno. Y proponer mejoras. Y supervisar lo que se hace. Nadie tiene todos los recursos para resolver un problema (ni Gobierno, ni ayuntamientos, ni comunidad autónoma, ni una asociación o un conjunto de ellas ni un líder vecinal o un grupo de vecinas).
6. La universidad debe seguir estructurando conocimiento, pero también duplicar su capacidad de escucha hacia lo que la ciudadanía y sus organizaciones realizan y reflexionan.
7. En el ámbito del trabajo en red de calidad en formación y empleo:
   1. Nadie debe ir a un recurso (orientación, formación, etc.) sin un plan de intervención previo. Incluyamos en dicho plan el ámbito comunitario y las potecialidades de la persona.
   2. Mejoremos las entrevistas iniciales que hacemos a las personas para casar exhaustivamente necesidades con recursos de zona (y necesidades no cubiertas)
   3. Si varias entidades dan formación del mismo tema, estudiemos complementariedad y especializaciones. ASumamos que es muy posible que tengamos que hacer cambios en ellas para prestar un mejor servicio a la comunidad, pero no caigamos en el apriorismo seguramente errado de que si hay muchas formaciones de la misma temática es posible que sean demasiadas.
   4. Hagamos temarios comunes de alfabetización digital, habilidades sociales, etc. para permitir formaciones en continuación. De esta manera, cuando un grupo de personas termina una formación de una entidad pueden seguir abordando con otra entidad los aspectos que no haya dado tiempo ver o dedicando horas de práctica
   5. En todos los talleres debemos buscar ejemplos para explicar el proceso colectivo de mejora de zona (plan comunitario). Da igual que la formación sea sobre el uso de las hojas de cálculo o de salud o de cualquier otra temática. El personal técnico de asociaciones y administraciones públicas tiene la obligación de conocer con detalle los procesos como el plan comunitario de su zona y las propuestas vecinales construidas en ese marco, ya que conseguir que más personas se vinculen a estas metodologías participativas es fundamental para acabar con la desigualdad.
   6. Hagamos intermediación laboral de forma conjunta. Construyamos formaciones comunes entre varias entidades vinculadas el tejido económico y a las potencialidades de la zona.
   7. Ni SSSSCC ni entidades deberíamos usar el término “usuario”. En su lugar, mejor “vecino/a, persona, gente, participante”. “Usuario” es reduccionista respecto al alcance de la transformación social y el protagonismo que buscan los procesos colectivos de mejora de un territorio, ya que cuando se es “usuario” la persona solo “usa”, pero no participa en la definición de qué pasa (bueno/malo) con ella y con el barrio, ni identifica compromisos ni supervisa resultados. Para romper con la desigualdad debemos concebir a la gente como lo que es.

Esta publicación forma parte del proyecto «Comunicambio en Palma Palmilla 21/22» enmarcado en la Estrategia Regional Andaluza de Cohesión e Inclusión Social (ERACIS); subvencionado por la Unión Europea y la Junta de Andalucía – Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, y cofinanciado por el Fondo Social Europeo.